viernes, 5 de junio de 2009

Dejó las drogas y el alcohol para volver a cantar


"La espera ha terminado". Con esas palabras se anunció el regreso definitivo de Whitney Houston, quien ya grabó su séptimo álbum, tras siete años de ausencia en el mercado musical, y que saldrá a la venta el primero de septiembre de este año.
Su regreso es toda una sorpresa para todos ya que en los últimos años la cantante vivió años de decadencia con una fuerte adicción al alcohol y a las drogas que le hicieron perder incluso casi toda su fortuna.
Sin embargo las adicciones no fueron los únicos problemas de Whitney. El divorcio de su ex marido, el cantante Bobby Brown en 2006, con quien protagonizó grandes escándalos relacionados con supuestos maltratos de parte de él y una controvertida disputa legal con su padre se convirtieron más tarde en problemas económicos que Houston no fue capaz de enfrentar.
"Esperen a ver las increíbles canciones que se escribirán para Whitney, al nivel de lo que le ha entregado al público por tantos años", afirmó el productor discográfico Clive Davis en febrero de este año, en la entrega de los Grammy 2009.
Patrick Demarchelier, el fotógrafo que retrató recientemente a la cantante para el nuevo álbum dijo a la revista People que Houston "está llena de energía y de vida. Se mueve como toda una diva y tiene el mejor espíritu".

Fuente: El pais España